Una investigación interna sobre 571 árbitros ha demostrado que "371 tienen cuentas de apuestas y 152 apuestan de forma activa", reveló Ibrahim Haciosmanoglu, patrón de la TFF durante una declaración a los medios.
"Estamos decididos a limpiar el fútbol de todo rastro de corrupción. No haremos ninguna excepción", avisó Haciosmanoglu, añadiendo que las "sanciones necesarias" se aplicarán "desde hoy" lunes.
10 de los árbitros acusados habrían realizado más de 10.000 apuestas, y uno entre ellos habría apostado en 18.227 ocasiones. También hay 42 árbitros que habrían apostado cada uno en más de 1.000 partidos de fútbol, detalló el patrón de la Federación.
Lo de Turquía viene de lejos
Ibrahim detalló que 22 de los 371 árbitros (siete centrales y 15 asistentes) trabajan a nivel nacional, pero no precisó sus identidades ni indicó si algunos eran sospechosos de haber apostado en partidos que ellos mismos dirigieron.

Frente a las acusaciones de parcialidad a las que se enfrentan a menudo los árbitros turcos, la TFF delegó en la primavera boreal de 2024 el VAR de varios encuentros de la Super Liga turca a colegiados extranjeros.
En febrero, un árbitro extranjero dirigió el intenso derbi de Estambul entre Galatasaray y su enemigo Fenerbahçe, que desde hace años acusa a los árbitros de favorecer a su rival.
