Junto a ellos dos, han sido elegidos el base del Mónaco Mike James, el alero del Olympiacos Evan Fournier y el escolta del Villeurbanne Theo Maledon.
En el caso de Juancho, todo ha cambiado respecto a su primera temporada en el Panathinaikos. El alero sufrió en su regreso a Europa tras muchos años deambulando en la NBA, pero en esta segunda ha dado un cambio radical, duplicando por mucho su anotación y su valoración, y casi haciendo lo mismo con los rebotes. En este curso, el del Panathinaikos ha promediado 10.3 puntos y 6.7 rebotes.
La ausencia de Lessort por su grave lesión, le ha permitido también jugar mucho como 4, rol desde donde ha sacado cierta ventaja, especialmente en ataque. "Combinando delicadeza con físico y un alto coeficiente intelectual de baloncesto, ha destacado en ambos lados de la cancha", ha destacado la Euroliga, que ha definido así la aportación del menor de los Hernangómez. "Ofensivamente, fue un arma versátil, capaz de estirar la pista con su tiro, finalizar en el tráfico, o hacer cortes inteligentes para crear oportunidades. En defensa, utilizó su envergadura y movilidad para defender múltiples posiciones, a menudo pasando a escoltas y aleros con facilidad".
Juancho, además, ha influido en momentos de alta tensión, cuando el balón quema, lo que es un factor que no aparece en números, pero sí se refleja en su elección en este segundo mejor equipo del torneo.
Tavares
De menos a más, el pívot ha continuado siendo un factor diferencial en el Real Madrid con su defensa y con su aportación en ataque, donde ha promediado 10.6 puntos con un 75,3% en tiros, 7.1 rebotes y 1.3 tapones en 34 partidos de temporada regular.
Ha sido el segundo en acierto en el tiro y rebotes. Y especialmente en la recta final de la temporada regular, Tavares ha sido fundamental para que el Real Madrid consiguiera ganar los seis últimos partidos, siendo elegido MVP de marzo-abril, aunque no pudo liderar a los blancos a los playoffs de manera directa.