Tras vencer el domingo a los Cavaliers, los Celtics derribaron este martes por la noche a otro de los grandes candidatos en la Conferencia Este, los Knicks.
Los 20.000 aficionados del TD Garden vibraron de orgullo verde en una noche que no tuvo un inicio prometedor.
Los visitantes parecían asfaltar su quinta victoria seguida cuando dominaban por un cómodo 37-23 al arranque del segundo cuarto.
El alero Mikal Bridges estaba inspirado como nunca este año, con 35 puntos, pero el mariscal neoyorquino, Jalen Brunson, sufría ante el férreo marcaje hasta quedarse en 15 tantos, con una serie de 6/21 en tiros de campo.
En ataque, los Celtics se encomendaron como casi siempre a Jaylen Brown, referente absoluto ante la baja de larga duración de Jayson Tatum.
"Estamos mejorando cada día"
El alero se encargó de poner por delante a los locales, que contuvieron un último arreón de los Knicks a base de triples de Mikal Bridges, que terminó con ocho convertidos.
"Una gran victoria de equipo en general", declaró Brown a la televisora NBC. "Comenzamos lentos, pero por eso hay cuatro cuartos", agregó el citado Jaylen.
"Estamos mejorando cada día. No nos descarten. Estamos aprendiendo y creciendo. Tenemos un grupo nuevo y un montón de chicos jóvenes que están jugando por primera vez", pidió el Jugador Más Valioso (MVP) de las Finales de 2024.
A la espera de confirmarse un eventual regreso de Tatum, todavía lejano, Boston ha ganado siete de sus últimos nueve partidos y se sitúa en el octavo lugar del Este.
Además, Hugo González se quedó a solo seis segundos de igualar su récord de participación en un encuentro de la NBA: superó los 22 minutos, tiempo en el que anotó cuatro puntos, capturó cinco rebotes y protagonizó un robo.