En el nada fácil campo del Oporto, la Roma empezó bien, pero luego tuvo que conformarse con un 1-1 que deja todo abierto de cara al partido de vuelta en la capital italiana, en el que faltarán Alexis Saelemaekers y Bryan Cristante.
Celik consigue el primer gol in extremis
Hubo un gol, un cambio y seis tarjetas amarillas en la primera parte en el Do Dragao, que acabó con la ventaja de la Roma en el tiempo añadido. Los giallorossi encararon bien el primero de los dos partidos que valen el pase a octavos de final de la Europa League, pero al principio les faltó el golpe decisivo en el área.
La amenaza de Artem Dovbyk, Paulo Dybala y Lorenzo Pellegrini apenas inquietó a los anfitriones, pero fueron los chicos de Claudio Ranieri los que más lo intentaron, llenando la mitad del campo rival sin poder concretar.
Los Dragoes no crearon ocasiones dignas de mención, pero por momentos inquietaron a la zaga sin Mats Hummels, gracias sobre todo a la presencia física de Samu.
Para la Roma, la peor noticia antes del descanso fue la lesión de Paulo Dybala, que salió en el minuto 39 debido a las secuelas de un golpe que sufrió en la rodilla a primera hora del día a manos de Alan Varela.
En el quinto minuto del tiempo añadido, el suplente Tommaso Baldanzi puso el balón en movimiento y Zeki Celik, que pudo seguir la jugada y colarse por la derecha en el área, aprovechó un desvío antes de disparar a puerta.
El partido casi se da la vuelta
En la segunda parte, el partido se reanudó como en la primera: mucho equilibrio, una Roma valiente y poco incisiva en ataque, pero muy bien posicionada sobre el terreno de juego.
Tras una buena parada de Mile Svilar al principio, la primera ocasión real llegó en el minuto 64, con Bryan Cristante en un saque de esquina, pero el portero realizó una gran parada. En la rápida reanudación, el Oporto castigó a los giallorossi y marcó el empate por mediación de Francisco Moura, gracias a un claro desvío de Tommaso Baldanzi.
Pasaron cinco minutos y llegó el segundo jarro de agua fría para los Capitolini, reducidos a diez tras la segunda tarjeta amarilla mostrada a Bryan Cristante.
En los últimos veinte minutos, la Roma se vio obligado a apretar los dientes para evitar la remontada, con uno menos, ante un rival completamente transformado y varias veces cerca de marcar el segundo gol.
La resistencia de los chicos de Claudio Ranieri funcionó y así el equipo visitante arrancó un valioso punto, en definitiva justo tras un partido jugado durante una buena hora a un buen nivel antes de los dos episodios decisivos.
Jugador Flashscore del partido: Moura (Oporto).