Con el rostro del icónico Wilfred Agbonavbare en el fondo de los Bukaneros por una iniciativa contra el racismo de la citada peña y la Plataforma ADRV, el querídisimo Míchel Sánchez recibió el cariño de la afición al cruzar el terreno de juego. Partido siempre especial para una leyenda del club madrileño, que volvía a casa en un contexto amable para los anfitriones, que sueñan con disputar competiciones europeas. "El año que viene, Rayo-Liverpool", ha cantado la grada en el pasado.
Apenas arrancado el partido, una grave pérdida de Yásper Asprilla pudo costar muy caro al Girona, ya que Jorge de Frutos remató en el área pequeña. Aunque algo incómodos, los visitantes respondieron en una acción de pillería por parte de Daley Blind, quien minutos antes de ser reemplazado por lesión, ejecutó con rapidez una falta y Arnaut Danjuma la mandó a guardar. Sólo la posición antirreglamentaria del atacante evitó el gol.
El equipo de Íñigo Pérez, de blanco y en mangas cortas pese al frío, imprimió un ritmo tan elevado como habitual. A nadie puede sorprender a estas alturas el frenesí de los capitalinos, que echaron de menos ese último pase de calidad. Unai López inauguró el apartado de amonestaciones en una primera mitad que acabó con las dolencias musculares de Paulo Gazzaniga, que aguantó el dolor para no gastar otra ventana.
Doblete y remontada
Al borde de la hora de juego, inmediatamente después de un doble cambio, Iván Martín aprovechó que tenía todo el tiempo del mundo y puso un fantástico centro que culminó Bryan Gil tras adelantarse a un despistado Andrei Rațiu. Tampoco fue la mejor acción de Augusto Batalla, quien decidió quedarse en la línea en lugar de atacar el esférico. Poco antes de aquello, Abdul Mumin había evitado una vertiginosa transición.
El Rayo se resignó a ver cómo el rival, que parecía reducir las pérdidas en campo propio, se adelantaba en el marcador pese a hacer menos méritos. Isi Palazón trató de devolver la igualdad con un tiro desde la frontal que rechazó Pau López, fichaje frustrado del Lens. Con sensacionales pases de Óscar Valentín y Pep Chavarría, Jorge de Frutos gozó de hasta dos oportunidades consecutivas que animaron a los allí presentes.
Sergio Camello, que apenas tuvo una oportunidad, dejó su sitio a Randy Nteka en el 77'. Y menuda decisión más trascendental la del entrenador pamplonica, ya que el recién ingresado atacante logró un fugaz doblete con sendas asistencias de Álvaro García, otro futbolista que accedió al verde como revulsivo. Y hasta protagonizó otro intento más, entre el tanto del empate y el de la victoria, para haber dado forma a una actuación igualmente brillante.
Jugador Flashscore del partido: Randy Nteka.