Aunque aún le quedaban dos años más de vinculación, el Submarino amarillo no ha querido correr riesgos con un jugador que comenzó en el filial, pero que ya ha disputado este curso 12 partidos entre Liga y Copa a las órdenes de Marcelino García Toral, después de convencerle su nivel en la pretemporada.
De este modo, el zaguero de la Vilavella tendrá ahora mismo cinco años más para seguir progresando en el equipo al que pertenece desde que tenía apenas ocho años.
"Es un joven talento formado en la Cantera Grogueta, a la que llegó con ocho años, siendo benjamín, procedente del equipo de su ciudad. En el club amarillo, ha jugado las últimas 11 temporadas, superando las distintas etapas formativas hasta alcanzar, el curso pasado, al Villarreal B, donde se consolidó en Segunda División, actuando como centrocampista, defensa y lateral derecho", ha publicado el cuadro de La Cerámica.
