De Rossi, un acierto para el Genoa

De Rossi
De RossiSimone Arveda / GETTY IMAGES EUROPE / Getty Images via AFP

Daniele De Rossi está transformando al Genoa. En cierto modo, puede que ya lo haya cambiado. Ocho puntos en cinco partidos es un inicio sólido: dos empates, dos victorias y solo una derrota, ante Fiorentina, Cagliari, Verona, Udinese e Inter.

La derrota llegó frente a los Nerazzurri, uno de los equipos más completos de la liga y principal candidato al Scudetto. No fue un resultado sorprendente y, en cualquier caso, tiene poco peso si se consideran las importantes victorias logradas previamente. Esos triunfos fueron partidos directos y decisivos, de los que pueden ser clave en la lucha por evitar el descenso.

La influencia del técnico se notó desde el primer momento: sin duda, estar dirigido por una figura como el ex capitán de la Roma aporta un plus. De Rossi transmite credibilidad, carisma y respeto de forma natural. Es un verdadero icono del fútbol mundial y muchos de los jugadores a los que ahora entrena crecieron viéndolo jugar, tanto en la Roma como con Italia.

Aun así, es importante evitar caer en tópicos fáciles; no existe una varita mágica ni milagros instantáneos. La única magia en la que De Rossi confía es el trabajo: desde primera hora de la mañana hasta la noche, se dedica a buscar soluciones a los numerosos problemas del equipo.

 

Levantando la moral

Ya lo hizo en la Roma, donde obtuvo excelentes resultados antes de ser destituido de una forma que aún hoy resulta dura y difícil de explicar. Ahora está repitiendo lo mismo en el Genoa, donde ya se ha ganado a la afición y al vestuario, con los jugadores dispuestos a darlo todo por él.

Su etapa en el banquillo del Genoa es corta y todavía es pronto para sacar conclusiones definitivas, pero los efectos ya se notan: el equipo vuelve a disfrutar del fútbol, algo que a menudo se da por hecho desde la grada o la televisión, pero que no es nada trivial. La Fiorentina es un buen ejemplo de contraste. Allí, los jugadores parecen lastrados por sus dificultades. Los partidos se viven como si fueran últimas oportunidades, la tensión aumenta y las sonrisas desaparecen.

La realidad es que se juega bien al fútbol cuando los jugadores se sienten bien, disfrutan y el grupo está sano, cuando el entrenador ha ganado la confianza del vestuario. Eso es exactamente lo que está ocurriendo en el Genoa con De Rossi. El técnico romano ha dado un impulso claro al equipo. El ritmo es más alto, el fútbol es más agresivo y varios futbolistas parecen renacer gracias a su trabajo.

 

 

Planes para enero

Queda mucho camino por delante y la plantilla necesitará refuerzos en el mercado de fichajes de enero, algo que no será sencillo para un club que pelea por la permanencia (Pisilli es uno de los nombres vinculados al Genoa). Sin embargo, contar con alguien como De Rossi, capaz de llamar personalmente a los jugadores y convencerlos del proyecto, puede marcar la diferencia.

Dos futbolistas en particular se han beneficiado de su llegada: Colombo y Vitinha. Colombo por fin empieza a justificar la confianza de quienes siempre creyeron en su potencial. Vitinha, por su parte, está mostrando destellos de gran calidad, aunque la regularidad sigue siendo su principal reto. El efecto De Rossi es evidente y Vitinha es casi siempre el jugador más peligroso del Genoa sobre el césped.

El sistema 3-5-2 que está implantando De Rossi parece adaptarse perfectamente a las características de la plantilla, y este es otro de sus grandes aciertos. En la Roma, sus mejores actuaciones como técnico llegaron con un 4-3-3, pero en el Genoa se está adaptando a los jugadores que tiene y los resultados están llegando. Más allá de los puntos, que son esenciales para evitar el descenso a la Serie B, el Genoa también debe desarrollar talento que pueda vender en el futuro para reinvertir en jóvenes.

 

El Genoa acertó

La decisión de confiar en De Rossi está dando frutos y la afición del Genoa espera que este camino continúe. En el banquillo de la Roma demostró inteligencia táctica, atención al detalle e ideas interesantes: la verdadera prueba será mantener este nivel ante equipos con menos calidad técnica, donde los partidos pueden complicarse de otras formas.

Por ahora, su impacto en el Genoa ha sido indiscutiblemente positivo. Los próximos compromisos serán exigentes, pero De Rossi y sus jugadores los afrontan sin miedo. Más allá de los colores, resulta refrescante ver a un profesional serio, preparado y apasionado como De Rossi liderando a un equipo. El fútbol necesita figuras como él.