Siniakova, que aun siendo la principal jugadora de dobles del mundo, tuvo que solicitar humildemente una wild card para competir junto al actual número uno del mundo en dobles masculino, Marcel Arévalo, finalmente se inscribió en la competición junto al actual líder en individuales, Sinner. Sin embargo, es posible que tenga que hacer frente a nuevas complicaciones. El italiano disputará la final en Cincinnati a las 15:00, hora local (21 horas CEST). Y lo hará frente al número dos, Alcaraz, que tenía previsto jugar el mixto con Emma Raducanu.
¿Es siquiera posible hacer algo así y tendrán más excusas los organizadores del último Grand Slam de la temporada? Supongamos que todo termina dos horas después, que es mucho suponer. Tras la ceremonia, ruedas de prensa y otras entrevistas, recuperación, quizá un control antidopaje. Sinner y Alcaraz no saldrán de Cincinnati hasta tarde esta noche, hora local.
Luego, al aeropuerto para el vuelo de dos horas de Cincinnati a Nueva York. Y sobre las 14:00, hora de Nueva York, ambos tienen previsto jugar la primera ronda en una de las pistas más grandes de Flushing Meadows. Habrá que convencer mucho a los organizadores...
Swiatek es sin duda la peor parada. Su final en Cincinnati con Jasmine Paolini no comenzará hasta el lunes a las 18:00 hora local. Y a mediodía, debería estar lista para unir fuerzas con Casper Ruud.
Así que es bastante realista que Sinner, Alcaraz y Shwiatek opten a no participar en el innovador dobles mixto del US Open. Un calendario tan ajetreado no es lo que necesitan antes del comienzo de la prueba reina del último Grand Slam de la temporada, el domingo.
Sería una complicación no sólo para Siniakova. La cuestión es si los organizadores le asignarían uno de los sustitutos o perdería definitivamente su participación en la competición de dobles mixtos.